Hola amigos, aqui les dejo frases de zeta hace unos pocos dias:
Ya relajado, mientras mezcla música en los atardeceres de Pinamar y agenda sus compromisos como DJ, productor discográfico y conductor de radio y TV, el bajista habla del futuro de Soda. "Quizás estemos al principio de un camino nuevo", dice Zeta, que no cierra ninguna puerta.
Zeta Bosio tiene motivos para sonreír: después de vivir unos meses en la burbuja que fue el regreso de Soda Stereo, no puede parar de enumerar proyectos y logros recientes. Ahora mismo atiende un celular desde Pinamar, donde acaba de cerrar un Sun Set Chill Out –traducido, mezcló música relajada al atardecer– en el parador de American Express. Tiene varios compromisos como DJ agendados para el verano, la posibilidad de presentarse en ese plan en la Winter Conference de Miami a mitad de año, su sello Alerta acaba de publicar a una banda que la rompe en Europa como Gogol Bordello, en febrero retoma su programa de radio Kid Rock por la Rock & Pop y está terminando la tercera temporada del ciclo televisivo con el que muestra "festivales y situaciones musicales del mundo", que este año se llamará Kid Rocking (antes era Rock Road). ¿Y hacer música? "Me gustaría sacar un EP para focalizar más el trabajo como DJ", adelanta. "Y ojalá pudiera armar un proyecto de banda para poder tocar en las pistas, que en este momento es lo que más me motiva."
–¿Volver a ser parte de una banda lo motivó más? –A ver, a ver... Es muy difícil tener dos bandas como Soda Stereo en la vida. Y cuando tenés una, no sé si da buscar otra. En realidad, lo que busco son otras situaciones. ¿Cómo voy a buscar otra banda de rock si estoy tocando en la mejor? Ojo, me encanta tocar con los Catupecu Machu, lo pasé muy bien con ellos. Y ahora, por más que tienen su presente armado con Sebastián (Cáceres, bajista), que es un capo, es natural que me suba a tocar algunos temas. Ya no pasa ni siquiera por la amistad, es una cuestión de pertenencia a la manada. Es una situación que no le pasa a mucha gente y me siento privilegiado de ser parte.
–¿Entonces el plan es una banda de música bailable? –Por lo menos, que arranque en las pistas. Ahí es donde está lo más corrosivo del rock en este momento. Bah, como siempre, porque la música de los 80 nació en las pistas, como herencia de la música disco, y hoy en día el rock recuperó las pistas: ahí es donde no está lo complaciente. Y últimamente veo muchas bandas que recuperan ese espacio para tocar, como Digitalism, The Presets, Datarock o LCD Soundsystem, y DJs que son como bandas, como Justice, Mstrkrft o 2 Many DJs. –Entonces, ¿qué hay con los rumores que circulan sobre un disco de Soda Stereo y sobre una gira europea? –La verdad, terminamos en diciembre y el plan original era seguir así. Hay muy buena onda, creo que se nota, y esto no pasaba antes. Hay un diálogo, estamos hablando, y eso permite sentir que la cosa está. Lo que vimos es que Soda está vivo: pudimos comprobarlo por la respuesta de la gente y por la respuesta nuestra, que estuvo a la altura de lo que la gente aportó. La gente reaccionó de un modo impresionante, agotó cuatro estadios apenas sacamos las entradas a la venta, y la banda respondió acorde a las mejores épocas. Parece mentira, pero esto que era un revival terminó siendo una nueva etapa de la historia de Soda Stereo.
–Por eso, si Soda está vivo, ¿por qué no hacer un disco? –Puede ser, puede ser. Pero, por ahora, vamos a tratar de disfrutar las cosas como fueron y respetar lo que hace a las individualidades, que fue importante para que todo esto pasara. Creo que tuvimos que separarnos y que pasara todo lo que pasó... Hay algo muy loco que hace que cuando uno está mucho tiempo con otras personas y pasan los años, en algún momento se confunde cuál es la vida de uno y cuál la de los otros. Uno empieza a sentirse responsable de lo que le pasa al otro y es una carga demasiado grande, que no estamos dispuestos a retomar. Lo bueno es haber recuperado la individualidad, la personalidad de cada uno, y que nos aceptemos tal como somos. Todo lo que hagamos dentro de este parámetro va a ser fantástico.
–En lo personal, ¿le gustaría hacer un nuevo disco de Soda Stereo? –Yo ya respondí a eso (se ríe). Siento que mi banda es Soda Stereo, pase lo que pase. Aunque no volvamos a tocar, va a ser siempre mi banda. Ojalá podamos hacer algo en el futuro, que podamos seguir esta historia. –¿Cómo fue vivir en la burbuja? –Fantástico. Aunque sé que hacerlo las veinticuatro horas durante todo el año puede enfermarte. Está bueno que dure un tiempo. Esa es una de las cosas que mantendría: trataría de salirme de la presión de lo que significa ser un Soda Stereo todo el tiempo. Es muy relajado andar un poco más suelto por la vida. Esas son cosas que vamos a tener que ver en el futuro. Ojo que no estoy diciendo nada, ¿eh? Ni lo hablamos entre nosotros: terminamos de tocar el último concierto y nos fuimos todos de vacaciones. Sí, nos mandamos mensajes diciendo que está todo bien, saludos por las fiestas y nada más. Pero la buena onda que hubo en el último recital fue muy transparente, ¿no? Esto es algo muy disfrutable para nosotros, ojalá encontremos la fórmula para poder volver a hacerlo. –La sensación después del último show debe haber sido diferente a la del que hicieron en el 97, ¿no? –Totalmente. En aquel último concierto terminamos todos en lugares distintos como after show, esta vez fuimos todos al mismo lugar, terminamos abrazados... como una banda. Y después nos fuimos a dormir todos en el mismo lugar, como si estuviéramos de gira. Creo que eso grafica la diferencia. Y en cuanto a sensaciones, en aquella ocasión sentíamos que estábamos llegando al final de un camino, mientras que esta vez sentimos que estamos en otro lugar. Quizás estemos al principio de un camino nuevo. Puede ser... Ojalá, Dios quiera. –Después de diez años, ¿se había desacostumbrado a la magnitud de Soda Stereo? –Uno deja de lado algunas cosas, es verdad. Pero la gente nos hizo acordar de que éramos importantes. En la gira hubo momentos muy grossos, como el show en Colombia, pero lo que más nos sorprendió fue Perú. Cuando se programó la gira no figuraba Perú y al final hicimos dos fechas, con la gente muy caliente, como tratando de que recibamos el mensaje de que querían vernos. Fue muy emotivo. Y Argentina, bueno, uno se siente en casa, pero además la gente es muy cariñosa, siempre nos han tratado bárbaro. La gente nos hacía sentir que estábamos en el living de casa en medio de un estadio lleno. Parece mentira, pero estábamos así de tranquilos, con esa intimidad. Y seis River, muy impresionante. Eso es algo imposible de planear desde la voluntad, es algo que te ocurre. Y creo que es porque llegaste al corazón de la gente, porque si no nadie te entrega ese cariño.
–¿Cómo es bajar a la Tierra después de Soda? –Qué sé yo, está bueno, tengo a mis hijos en la Tierra... La burbuja está buena, pero también lo está la vida real. Creo que lo lindo que nos permitió Soda fue que pudimos jugar unos meses a esto sin enfermarnos como antes. Una de las cosas que habían colaborado para el desgaste había sido la presión que nos metíamos para hacer las cosas. Sentíamos que debíamos responder con un disco del mismo nivel después de haber hecho algo grandioso como Nada personal o Signos. Soda fue siempre una banda que iba a más, nunca se caía, entonces vivimos cada etapa con una gran presión para estar al nivel de la situación que habíamos generado en la etapa anterior. Esto es lo que queremos vivir con más tranquilidad ahora, porque nuevamente nos hemos generado una etapa de presión. Tenemos puesto de vuelta eso del grupo más importante de Latinoamérica y ahora vamos a tener que hacer algo... (se ríe). Entonces, lo ideal es tratar de tomarse tiempo para poder estar al nivel de la situación. –¿Cómo es eso de "vamos a tener que hacer algo"? –Será en grupo o individualmente, pero vamos a tener que estar al nivel de lo que generamos.
Ojala y sea el principio de un nuevo comienzo, por lo menos sabemos que Zeta asi lo quiere y parece que Gustavo y Charly también que opinan ustedes............
-Fabrizio Castro B-